Lluvias hay de muchos tipos, desde un chirimiri que moja aunque apenas se vea, una tormenta, un chubasco hasta un monzón. Pero desde luego si hay una lluvia curiosa es la lluvia de ranas que se produce por la rápida evaporación del agua de rios y pantanos y que luego descarga torrencialmente en algún lugar, como ocurrió en Rebolledo, Alicante en 2007.
No hay comentarios:
Publicar un comentario